La etiqueta epoxi consta de un chip RFID (como un circuito integrado) y una antena montadas sobre un sustrato. El chip almacena información que puede ser leída de forma inalámbrica mediante un lector o escáner RFID. Luego se aplica la resina epoxi para encapsular el chip y la antena, brindando protección contra factores ambientales como la humedad, el polvo y el impacto físico.
El uso de resina epoxi en estas etiquetas ofrece varias ventajas. En primer lugar, proporciona durabilidad, lo que hace que las etiquetas sean resistentes al agua, a los productos químicos, al calor y a las condiciones adversas. Esto los hace adecuados tanto para aplicaciones interiores como exteriores. En segundo lugar, el recubrimiento epoxi mejora la apariencia visual de las etiquetas y permite su personalización agregando logotipos, diseños o elementos de marca.
Las etiquetas epoxi suelen ser pequeñas y livianas, lo que las hace cómodas para llevar como llaveros, accesorios para tarjetas de identificación o incluso como accesorios decorativos. Se pueden acoplar fácilmente a diversos objetos, como llaveros, bolsos o equipos, con fines de seguimiento e identificación. El rango de lectura de las etiquetas epoxi varía según el chip y la antena específicos utilizados, pero normalmente oscila entre unos pocos centímetros y varios metros.
Entendemos que una etiqueta epoxi NFC es una extensión de su marca. También pueden mostrar su personalidad y objetivo comercial. Le proporcionamos una variedad de formas, tamaños, acabados e impresión.
Opciones para hacer que sus llaveros epoxi sean tan personalizados como su personalidad.