La gestión de tuberías de dragado es el manejo sistemático y eficiente de las tuberías utilizadas en las operaciones de dragado. Implica la planificación, instalación, mantenimiento y monitoreo de tuberías que transportan material de dragado, como sedimentos y escombros, de un lugar a otro. Requiere una cuidadosa consideración de la complejidad técnica, el cumplimiento de los estándares de calidad y la implementación de sistemas sólidos de seguimiento y mantenimiento. Los sistemas de gestión compuestos por etiquetas electrónicas RFID se han convertido en una valiosa solución para mejorar la gestión de tuberías de dragado.
Los ductos dragados se caracterizan por su longitud y la necesidad de equipo especializado durante su despliegue. Para garantizar la integridad de las tuberías, deben diseñarse para resistir las duras fuerzas de las operaciones de dragado y el duro entorno marino. Los procedimientos de instalación precisos son fundamentales para garantizar el rendimiento a largo plazo. Las potentes capacidades de seguimiento y gestión de las etiquetas RFID abordan esta complejidad. Las etiquetas RFID permiten un seguimiento preciso y en tiempo real de los componentes de las tuberías, como juntas, codos y conectores. En segundo lugar, las etiquetas RFID proporcionan una forma confiable de registrar y rastrear esta información esencial durante todo el ciclo de vida de la tubería. Al mismo tiempo, las etiquetas electrónicas RFID pueden rastrear y registrar eficazmente las actividades de mantenimiento de cada componente de la tubería. Al capturar las fechas de inspección, reparaciones y reemplazos, las empresas de dragado pueden crear registros de mantenimiento completos. Finalmente, las etiquetas electrónicas RFID equipadas con sensores pueden monitorear continuamente parámetros clave como la presión y la temperatura. Al recopilar datos en tiempo real, las empresas de dragado pueden monitorear el estado de las tuberías, detectar anomalías e iniciar acciones correctivas de inmediato. Este enfoque proactivo mejora la seguridad operativa y reduce el tiempo de inactividad, lo que genera importantes ahorros de costos.